En alguna otra ocasión hemos hablado del estilo industrial, una corriente decorativa que cada vez cuenta con más adeptos. Lo cierto es que nos encanta este tipo de decoración inspirada en las pequeñas fábricas del siglo XX y los antiguos ateliers de artistas. Si bien es cierto que normalmente es un aspecto que se intenta aplicar directamente en estancias como el comedor, también puede funcionar muy bien en lugares como la cocina.
Para poder aplicar el estilo industrial en nuestra cocina tendremos que tener en cuenta una serie de claves. Para empezar los materiales: ¿cuáles de ellos me sirven para conseguir una cocina industrial? Lo cierto es toda cocina industrial debe tener altos componentes en acero. Si no queremos tener absolutamente todos los muebles de acero quizá optemos por alternar estos con muebles lacados de color negro o blanco. Eso sí, la encimera deberá ser de acero, así como los electrodomésticos. También podemos usar aluminio, cristal e incluso ciertos toques de madera.
Es muy interesante incluir en este tipo de cocinas muebles modulares, de esos que van provistos con rueda y que se pueden mover por toda la cocina. Son de lo más prácticos, además nos ayudarán a ahorrar espacio dependiendo del momento.
Hay que tener claro también que dentro de esta corriente industrial podemos encontrarnos con dos tipos de cocina. Por un lado tenemos las cocines con un origen mucho más retro. Por otro lado están las cocinas más modernas, esas que mezclan líneas minimalistas con los materiales propios de una cocina industrial.
El revestimiento de las paredes usa azulejos claros, normalmente blancos y en un formato pequeño. También es buena idea usar acabados en piedra y ladrillo, algo que quedara realmente bien si nuestra casa es de estilo loft y contamos con vigas de madera.
Si contamos con espacio suficiente, os animamos a colocar una isla de cocina con las mismas características que el resto de los muebles. Así, también podemos incluir en el diseño una bonita campana decorativa.
Otro detalle interesante lo encontramos en el fregadero. Aquí se puede usar un grifo largo, de esos que se estiran como una manguera. Son muy útiles, y el toque industrial está más que asegurado.
Por último, en lo que la iluminación se refiere, aunque podemos optar por los plafones e incluso alójenos, lo cierto es que las lámparas de estilo fábrica y almacén dan muy buenos resultados.
Fotos vía: virlova75, presupueston y decorahoy